En el circo de la imaginación de los chicos del taller, hay hombres forzudos capaces de caminar por la cuerda floja sosteniendo un elefante en la palma de la mano; hay hipopótamos que cantan; esqueletos milenarios y hasta un cocodrilo que engulle a sus víctimas y las hace reaparecer en su lomo.
Antes habíamos leído “Olivia salva al circo”, de Ian Falconer y “¿Qué crees tú que puedes hacer en mi circo?”, de Georgina Roo.
There are 0 comments